Lo nuevo de los oroínos de Chip Musik Records viene de la mano de Semilla Galáctica, alias de Oscar Cirineo, quien nos presenta su alucinante ópera prima, “Tecnología Desconocida”, un tratado de “meditation electronic” –como él lo define- o IDM etéreo de 58 minutos que bebe extasiado de las hermosas aguas rupturistas de gente como Autechre, Phoenicia o Aphex Twin.

A estas alturas, año 2012, existen incontables ejemplos de discípulos de aquella escuela IDM experimental nacida en los prístinos años 1990, baste ver nomás la cantidad de blogs

dedicados a difundir las bandas y caleturas en este estilo. Lo de Semilla Galáctica va en esa línea sin duda. Algunos podrán acusarlos de retrógrados o de que no ofrecen nada nuevo ni propio u original, yo no. De hecho soy de los que cree que gran parte de la música hecha en los años 90 resulta tan fresca hoy y más nueva que el resto de sonidos, estilos y bandas nacidos en el nuevo milenio. ¿O a alguien le suena más avantgarde/transgresor Animal Collective que Main o lo último de Julia Holter que el nuevo de Mouse On Mars? ¡Ja!

El hecho que, aparentemente, la creación de música peruana de avanzada esté descentralizándose es otra realidad digna de ser resaltada y quizá sea síntoma del progreso que estamos llegando a alcanzar, después de mucho pundonor, en el Perú.

Después de lo logrado por gente como Semilla Galáctica y su notable “Tecnología Desconocida” –un álbum que merece estar entre lo mejor de la cosecha musical peruana, al lado del “Auquico” de Evamuss y el “Juniperfin” de Silvania, muy por encima de tantos actos electrónicos locales a los que les sobra infraestructura pero que acusan una escasez de talento impresionante- el futuro inmediato de la música peruana se proyecta elevado.

Wilder Gonzales Agreda.